De mientras...

OJOS NO TAN CLAROS Era de esperarse, de dónde sacaría los ojos claros, cómo le explicaría que en la familia todos tenemos los ojos cafés. Mejor así, hijo mío, sigues muy guapo.


HACE SÓLO UN MES Un clásico de la egoteca Luciana.

Parece increíble que no pueda actualizar el blog de Lucio. No he sido capaz de organizar las casi mil fotografías que ya le tomé, no puedo regularizarme con los pendientes del trabajo y por si fuera poco no puedo pasar con Lucio todo el tiempo que quisiera.
Él, mientras, sigue creciendo. Según Mamá de Lucio, a veces cambia su fisonomía de la mañana a la noche. Cada vez interactuamos más y tengo pendiente fotografiarlo durante el baño, asunto que todavía requiere de una logística especial. Los paseos son cada vez más frecuentes y afortunadamente ha aceptado con agrado el uso del canguro. Me reconforta saber que a pesar de nuestra inexperiencia hemos ido superando los obstáculos y gozamos de un bebé sano y feliz. Las mañanas suelen ser muy divertidas. Contrario a las recomendaciones pediátricas, Lucio se baña a las 7am. Esto relaja a todos y me voy al trabajo con una gran sonrisa suya en mente. Ya no tiene los ojos tan claros, sus días de bebé de comercial pasaron, lo que está in son las bocas y balbuceos varios. Si todo sigue como lo planeamos, el sábado próximo viajaremos unos días a Cancún. Sólo espero que Lucio no se vuelva loco con la temperatura, finalmente el gen caluroso lo pudo heredar de padre o madre.
De mientras, dos fotos que no he publicado.